La injusticia lingüística en el mundo académico

Históricamente, las lenguas francas— lenguas vehiculares adoptadas por grupos de personas con distintas lenguas maternas—han jugado un papel muy relevante en la investigación científica. De hecho, aún podemos apreciar la prevalencia del latín como la lengua científica de la Edad Media en las clasificaciones taxonómicas; y el griego antiguo como base lingüística de múltiples términos científicos, como ‘hidrodinámica, ‘zoología’, y ‘hipotético’.

Sin estas ‘lenguas puente’, las investigaciones científicas habrían quedado aisladas y restringidas a ciertas comunidades dificultando el progreso científico.

¿Pero sigue siendo este el caso en nuestra sociedad contemporánea? Actualmente, el inglés es la lengua de elección en el ámbito de la escritura en investigación. Sin embargo, los nativos de habla inglesa representan tan solo el 5% de la población global. ¿Cuáles son entonces las repercusiones para la gran mayoría de investigadores que se comunican en una segunda lengua?

De hecho, pocos estudios han tratado de cuantificar el impacto que tiene para los autores cuya lengua materna no es el inglés el hecho de tener que publicar sus trabajos en una segunda lengua. En este post examinaremos nuevos estudios que han abordado estas desigualdades, así como las consecuencias de comunicar la ciencia predominantemente en inglés

¿Qué es la injusticia lingüística?

El término injusticia lingüística se utiliza para describir las desventajas en el mundo académico a las que tienen que hacer frente las personas cuya lengua materna no es el inglés. La injusticia lingüística enfatiza la dificultad que supone leer, escribir, y comunicar los estudios científicos en una segunda lengua, así como la menor probabilidad de éxito a la hora de publicarlos. Aunque no está universalmente reconocido, cada vez más investigadores están abordando este sesgo inherente a la ciencia actual.

Los investigadores cuya segunda lengua es el inglés deben superar retos considerables comparado con sus colegas angloparlantes. A menudo, la calidad lingüística se equipara con la calidad de la investigación. Así, en muchos casos, los revisores pueden ser más propensos a rechazar o a enviar artículos a revisión si detectan errores lingüísticos y gramaticales, extendiendo el tiempo de publicación y hasta incluso rechazando la publicación del estudio por completo.

Actividades científicas

Las expectativas de la ciencia moderna actual son muy rígidas. Los investigadores, sobre todo aquellos que se encuentran al inicio de sus carreras, se enfrentan a una elevada presión por publicar sus trabajos en revistas respetadas. Si lo consiguen, esto les otorga credibilidad a su trabajo y les proporciona más oportunidades.

Sin embargo, aunque los investigadores que tienen el inglés como lengua materna representan una proporción pequeña del total de investigadores, el 75% de las revistas académicas se publican en inglés. Como consecuencia, muchos investigadores consideran que es más fácil publicar sus artículos en inglés ya que disponen de un número mayor de revistas dónde poder elegir.

Obviamente, este hecho supone un gran reto para la mayoría de los académicos. Sin embargo, la enorme carga causada por el tiempo y esfuerzo extras dedicados a llevar a cabo actividades de investigación en una segunda lengua ha sido infravalorada por la comunidad científica.

Investigación y publicación

Los investigadores deben ser capaces de entender, interpretar y utilizar el contenido de los estudios publicados. Así, leer artículos científicos es una actividad fundamental para el éxito académico. Sin embargo, leer en una segunda lengua puede suponer un obstáculo muy importante.

Estudios recientes han demostrado que los investigadores cuya lengua materna no es el inglés requieren aproximadamente hasta 2 veces más tiempo para leer los artículos académicos. Este hecho se ve influido por su nacionalidad—si son de un país con bajo o elevado nivel de inglés— y es patente en todas las etapas de la carrera investigadora, desde investigadores jóvenes hasta investigadores consolidados.

En general, los autores que escriben en una segunda lengua lo hacen de manera más lenta y están menos seguros en la utilización de su ‘voz’. Esto último es especialmente notable en los casos de discrepancia con un colega cuya lengua materna es el inglés. Sin embargo, esto ya no se observa en etapas tardías de la carrera investigadora.

Los investigadores que tienen el inglés como segunda lengua tienen una probabilidad de 2.6 veces más de que su artículo sea rechazado debido al estilo de su escritura, y de unas 12.5 veces más de que su artículo requiera revisiones en comparación con sus homólogos hablantes nativos de inglés.

Un estudio reciente publicado en MDPI también ha tratado la prevalencia de los cursos de lengua inglesa en universidades de todo el mundo y de cómo estos pueden afectar negativamente a los estudiantes transnacionales.

Presentaciones orales y networking

Las barreras lingüísticas también afectan otras áreas esenciales para el éxito académico. Por ejemplo, alrededor de un tercio de los investigadores jóvenes cuya lengua materna no es el inglés evitan asistir a conferencias en inglés. Además, la mitad de estos eluden realizar presentaciones orales debido a su falta de confianza a la hora de comunicarse en inglés.

Cuando dan ponencias, la preparación de sus presentaciones les requiere mucho más tiempo. De hecho, se calcula que los investigadores de países de nivel bajo y moderado de inglés dedican de mediana, un 93.7% y un 38.0% más de tiempo, respectivamente, a preparar una presentación oral en inglés comparado con los hablantes nativos de inglés.

Comunicar su trabajo de manera efectiva en inglés también es mucho más difícil. Y esto es aún más pronunciado investigadores jóvenes de habla no inglesa procedentes de países con nivel bajo de inglés. En total, un 65% de estos investigadores consideran difícil comunicar su trabajo en una segunda lengua como es el inglés.

Las conferencias y las presentaciones son un aspecto muy importante para alcanzar una carrera académica de éxito. Estos investigadores pueden ver reducidas significativamente las opciones de que su trabajo sea visibilizado dentro de su campo, impactando significativamente su carrera investigadora.

Diseminación

La publicación de artículos en inglés se considera “la única manera de ser evaluado como investigador”. Aunque algunos autores no lo perciben como una desventaja significativa, sí que puede tener ciertos efectos colaterales. La publicación de los trabajos de investigación en inglés puede proporcionar más probabilidad de reconocimiento global, pero al mismo tiempo, hace menos probable que los artículos sean leídos en las comunidades locales de los autores.

Así, muchos hablantes no nativos de inglés optan por traducir sus artículos y publicarlos en su primera lengua lo que supone un doble esfuerzo—tiempo que, de otra manera, podrían dedicar a nuevas investigaciones.

Edición lingüística y proofreading

Se calcula que alrededor del 50% de los hablantes no nativos de inglés piden a un amigo o a un colega de profesión angloparlante que revise la calidad lingüística de su trabajo científico.

Además, muchos investigadores que utilizan el inglés como su segunda lengua optan por recurrir a servicios de edición de inglés con tal de mejorar la calidad lingüística de sus artículos. En un post anterior de nuestro blog ya destacamos beneficios de utilizar servicios de edición lingüística.

Sin embargo, muchos investigadores de países de ingresos bajos o medios no disponen de financiación suficiente para poder permitirse el acceso a este tipo de servicios. Esto les sitúa en clara desventaja estableciendo una barrera no únicamente lingüística sino también entre ricos y pobres.

¿Qué se puede hacer para apoyar a los hablantes no nativos de inglés?

Los hablantes no nativos de inglés requieren tiempo extra para llevar a cabo todas las actividades necesarias a largo del proceso de publicación—investigación, proofreading, comunicaciones orales— lo que supone un gran obstáculo para ellos y los sitúa en clara desventaja comparado con sus homólogos angloparlantes.

Existen múltiples maneras para apoyar los autores cuya lengua materna no es el inglés dentro de la comunidad científica. En primer lugar, las desventajas a las que deben hacer frente tienen que ser reconocidas con datos objetivos. El tiempo extra dedicado a escribir, leer, y preparar manuscritos y presentaciones en inglés tiene debe ser reconocido y tenerse en cuenta en las expectativas.

En segundo lugar, se podrían utilizar los servicios de traducción para permitir a los investigadores poder leer artículos en su primera lengua. Esto sería especialmente beneficioso para aquellos investigadores procedentes de países con nivel bajo de inglés, así como para investigadores jóvenes que están menos acostumbrados a las exigencias de leer en inglés. Esto se podría hacer extensible a las conferencias fomentando presentaciones multilingües y guías inclusivas.

Finalmente, la edición lingüística debería ser más accesible para los investigadores, mediante becas y programas de financiación. Con los servicios de edición lingüística en inglés, los investigadores de habla no inglesa pueden estar seguros de que la calidad lingüística de su trabajo está a la altura de los estándares de publicación proporcionándoles mejores opciones para que su artículo sea aceptado.

MDPI, injusticia lingüística, y ciencia abierta

Los sesgos inherentes presentes en la comunidad académica deben ser abordados de manera prioritaria. En MDPI, hacemos frente a la injusticia lingüística y cada artículo publicado está sujeto a un proceso riguroso de edición lingüística. Así, los hablantes no nativos de inglés pueden estar seguros del lenguaje utilizado en su trabajo una vez publicado. Siendo una editorial que publica todos sus artículos en acceso abierto, su trabajo también se beneficia de mayor visibilidad e impacto.

MDPI está comprometido con los valores centrales de la ciencia abierta y con promover el intercambio científico en todas sus formas. Esto significa que cualquier persona tiene acceso a todo los trabajos publicados en MDPI de manera ilimitada y gratuita. Así mismo, cualquier persona es libre de utilizar el contenido de un artículo, siempre y cuando el artículo original sea acreditado/citado adecuadamente. De esta manera, eliminamos las barreras de acceso a la investigación y fomentamos la colaboración global en nuestro camino para alcanzar los objetivos de ciencia abierta: Igualdad y and justicia, Diversidad e inclusividad, Igualdad de oportunidades, y Colaboración, participación e inclusión.

Si quieres  aprender más acerca de la política de acceso abierto de MDPI, te animamos a visitar nuestra página web. Además, también tenemos otros artículos en nuestro blog para ayudar a los autores a mejorar su comunicación escrita.

La edición lingüística es una manera fiable de garantizar que tu investigación tenga el máximo impacto superando cualquier barrera lingüística. MDPI Author Services ofrece servicios de corrección de inglés de alta calidad para ayudarte a preparar tu artículo para su publicación, ya sea para publicarlo en MDPI o en otra editorial.

Para ayudar a garantizar un proceso rápido y claro, nuestro Rapid Service proporciona a los autores una corrección lingüística completa en 1 día laborable.

 

Este artículo es una traducción. El artículo original fue publicado por Nat Kelly  en el blog en inglés.